La Coordinadora de Trabajadores del Metal (CTM) y la organización anarcosindicalista solicitaron una reunión en el SERCLA este 9 de julio, donde expresarán las inquietudes de las plantillas del metal.

La Confederación General del Trabajo (CGT) ha dejado claro en varias ocasiones que pese al silencio mediático, la manipulación de los dos grandes “sindicatos”, la prepotencia de la patronal y la represión del Estado a través de sus fuerzas y cuerpos de seguridad, la huelga del metal –que se volvió indefinida el pasado 23 de junio en Cádiz-, no va a ser desconvocada mientras existan trabajadores secundándola firmemente.

Además, desde CGT han denunciado la situación que muchas de estas personas están sufriendo debido a las amenazas que reciben cada día por parte de miembros de Comités de Empresas, como el de ALESTIS. Otras empresas están llamando a sus empleados a cubrir el trabajo de otras donde sus plantillas se encuentran ejerciendo su derecho a la huelga. CGT ha manifestado que a la presión y al esquirolaje se le suma la agresión de los cuerpos y fuerzas de seguridad, quienes están a su vez llevando a cabo detenciones y persecuciones arbitrarias y sin ningún sentido hacia las personas que están luchando por su futuro en Cádiz.

CGT y CTM mantendrán una reunión con la patronal FEMCA el próximo miércoles 9 de julio en Cádiz. En este sentido, CGT asegura que su intención es la de dialogar y trasladar las demandas reales de las personas trabajadoras del sector del metal de Cádiz. Estas reivindicaciones han sido expuestas por estas personas en diferentes asambleas desde que empezaran las movilizaciones hace un par de semanas. CGT ha subrayado que el preacuerdo que la patronal y los sindicatos mayoritarios pretenden imponer deja sin cobertura precisamente a los trabajadores más precarizados, que son los que prestan servicio en empresas subcontratadas y auxiliares de la Bahía de Cádiz.

Del mismo modo, la organización anarcosindicalista ha mostrado su apoyo y solidaridad con las personas represaliadas y detenidas, y sus familiares y entornos directos que estaban apoyando la digna lucha del metal. Por todo ello, desde CGT han dejado claro que mientras existan trabajadores con ganas de pelear por sus condiciones laborales la huelga se mantendrá activa.